Demandan cierre de cortes de migración por seguridad

La situación de las cortes de inmigración está cambiando constantemente. Algunas cortes se han cerrado temporalmente en Arizona mientras otras llevan a cabo audiencias en las que los inmigrantes o abogados aparecen por video llamada (Ilustración por Adrien Stanziani Creative Commons)

PHOENIX – La pandemia del coronavirus ha reducido a cientos de ciudades en todo Estados Unidos a ciudades fantasma, lo que ha cambiado la rutina diaria de millones de estadounidenses.

Sin embargo, para los migrantes bajo custodia federal, que esperan que sus casos sean presentados ante un juez, su realidad no ha cambiado mucho.

Para el 28 de marzo, el Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) tenía un promedio diario de detenidos –en base al total de personas en detención de ICE en todo el país dividido por el número de días en el año fiscal (del 1 de octubre al 30 de septiembre)– de 43,026 personas.

Tres de las cuatro cortes de inmigración en Arizona –en Phoenix, Tucson y Eloy – continuaban abiertas al cierre de está edición. La corte cerrada está en Florence. Todas las audiencias programadas al 1 de mayo para inmigrantes que no están en la custodia de autoridades de migración, así como también los casos bajo el Protocolo de Protección a Migrantes incluidos en el calendario para esa misma fecha, han sido pospuestos por el Departamento de Justicia. La Oficina Ejecutiva para la Revisión Migratoria (EOIR, por sus siglas en inglés) actualiza el estatus de todas sus cortes en su sitio web y en muchos casos como en Phoenix los abogados asisten en persona pero ven a sus clientes por videollamada.

Todas las audiencias de personas que no están detenidas programadas para el 10 de abril han sido pospuestas en las 63 cortes de inmigración. Pero jueces de inmigración y personal que trabaja en las cortes de varias asociaciones de profesionales dicen que eso no está cerca de ser suficiente. Estos presentaron una demanda en contra de ICE y EOIR la cual supervisa todos los casos de inmigración en las cortes de los Estados Unidos.

La American Immigration Lawyers Association, el Immigration Justice Campaign, el National Immigration Project of the National Lawyers Guild y varios inmigrantes que fueron detenidos presentaron una demanda el 30 de marzo. En la misma urgen a ICE y a EOIR a que suspendan de forma indefinida todas las audiencias de corte de inmigración en persona. También piden que se provean oportunidades para que los representantes legales puedan comunicarse de forma remota con sus clientes o si lo hacen en persona tengan el equipo adecuado con el cual protegerse.

La abogada de inmigración Pamela Florian, directora de American Immigration Lawyers Association en Arizona (AILA, por sus siglas en inglés) dijo que tanto ella como las personas con las que trabaja tienen temor no solo por sí mismos si no por sus clientes.

“Los detenidos que están en centros de detención en Arizona enfrentan un riesgo más elevado por las condiciones en las que viven”, dijo Florian. “No queremos ser quienes les llevemos el virus porque todavía estamos obligados a continuar con nuestras audiencias durante la pandemia”.

Las asociaciones también están buscando que la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración (EOIR, por sus siglas en inglés) proporcione a los inmigrantes detenidos y consejeros legales con equipo de protección, tales como mascarillas N95, protección ocular y guantes, para ser utilizados cuando se reúnen en instalaciones que requieren dicho equipo. Los abogados temen que si no se les proporciona el equipo y no pueden acceder a ellos de forma independiente, no podrán reunirse con sus clientes cuando sea necesario.

“Si no tenemos el equipo de protección personal requerido, el cual está escaso en estos momentos a nivel nacional; no ver a nuestros clientes o ser privado de hacerlo plantea preocupaciones debido al proceso, porque necesitamos poder preparar a nuestros clientes para sus audiencias”, agregó Florian.

La abogada de inmigración Margarita Silva ha estado defendiendo a inmigrantes detenidos y no detenidos durante 18 años. El 20 de marzo, llegó a un centro de detención de Arizona para reunirse con un cliente; iba con una colección improvisada de equipo de protección personal que ella misma proporcionó.

Silva dijo que ella y sus colegas comenzaron a llevar su propio equipo de protección para reunirse con los clientes en los centros de detención después de que ICE les dijera que no se les permitirá entrar si ellos.

“Tengo una amiga que acababa de tener un bebé en noviembre y ella me dijo: ‘Bueno, tengo algunas mascarillas. Puedes llevarte un par’”, dijo Silva. “Y entonces mi esposo usa gafas protectoras para algunos de sus trabajos, y me dijo: ‘bueno, aquí tienes, puedes usarlas’. Y terminé recibiendo unos guantes de nitrilo”.

Silva fue autorizada a entrar en la instalación usando su equipo provisional. Mencionó que algunos de sus colegas han estado usando gafas de sol graduadas y gafas de natación para reunirse con clientes bajo custodia.

Con una colección improvisada de equipo de protección, la abogada de inmigración Margarita Silva llega a un centro de detención de Arizona el 20 de marzo para reunirse con un cliente. (Foto proporcionada por Margarita Silva)

“No hubo ningún escrutinio”, dijo Silva. “Tenían un letrero en el frente que decía que iban a tomar nuestras temperaturas antes de entrar, y que si tenías fiebre, nadie iba a entrar. Entré con un grupo de unas 10 personas. La temperatura no se tomó a nadie”.

Sin embargo, dijo que estaba más sorprendida al saber que ella y sus colegas eran los únicos en las instalaciones que llevaban equipo de protección personal.

“Esa era la otra cosa rara, que el equipo de protección sólo se aplicaba a los abogados de inmigración”, continuó Silva. “Ninguno de los guardias llevaban equipo protector. Ninguno del personal administrativo lo utilizaba. El personal médico dentro de las instalaciones no llevaban puesto nada de esto. Los detenidos no llevaban nada de esto”.

Los abogados de inmigración que demandan a la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración, también insisten en que el Departamento de Justicia les permita comunicarse con sus clientes detenidos para promover un entorno más seguro, ya que las llamadas telefónicas limitadas a las que actualmente tienen acceso simplemente no son suficientes.

Silva dijo que ella y sus asociados han recibido –por ahora– luz verde para atender vía telefónica a todos los casos de detenidos de Arizona. En el pasado, dijo, los abogados tenían que presentar una solicitud por escrito a un juez si querían asistir a una breve audiencia telefónica, lo que los abogados que viven lejos de las instalaciones hacían con frecuencia.

Si la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración no puede satisfacer sus demandas, un representante del buró profesional de abogados dijo, que deben liberar a los inmigrantes detenidos con “acceso inadecuado a la comunicación remota” con sus representantes legales o tribunales de inmigración.

Los abogados de inmigración y los inmigrantes detenidos difieren en cuanto a si los detenidos deben ser puestos en libertad en este momento, dijo Silva. Muchos creen que los tribunales deben ser cerrados por completo, agregó, pero otros están frustrados de que los inmigrantes bajo custodia no serán puestos en libertad como resultado.

“Una gran cantidad de estas personas podrían ser liberadas de forma segura, ya sea por su propio reconocimiento o bajo fianza”, dijo Silva. “Muchos de los (inmigrantes en custodia) no son personas que se hubieran considerado peligrosas. Tienen casas y familias a las que ir. Así es que no es como si estuvieran vagando por las calles. Son personas que tenían trabajo”.

Aunque a los inmigrantes no detenidos no les importe que sus casos se pongan en espera por el momento, dijo, muchos quieren que sus casos avancen si se ven obligados a permanecer bajo custodia.

Mientras tanto, la Asociación Americana de Abogados de Inmigración ha tomado la iniciativa en el esfuerzo por suspender temporalmente los tribunales de inmigración. La organización inicialmente se unió a la Asociación Nacional de Jueces de Inmigración y a la Federación Estadounidense de Empleados Gubernamentales Local 511 para publicar una declaración el 15 de marzo que expresaba su preocupación por la salud y seguridad de los fiscales y abogados de inmigración.

Desde entonces, otras 73 organizaciones han unidos sus esfuerzos para cerrar los tribunales y han dirigido una carta al Fiscal General de los Estados Unidos William Barr. La carta, firmada por organizaciones como la Coalición de Arizona para poner fin a la Violencia Sexual y Doméstica y Amnistía Internacional de EE. UU., pidieron a Barr que cerrara inmediatamente todos los tribunales de inmigración de Estados Unidos.

Como presidente de la Asociación Nacional de Jueces de Inmigración, la jueza A. Ashley Tabaddor supervisa un sindicado de jueces que trabaja para mejorar el sistema de inmigración en las cortes y promueve el bienestar de sus miembros.

“Es realmente un evento histórico que tengamos fiscales y las organizaciones de abogados defensores que se unen con los jueces, todos están de acuerdo en que los tribunales de inmigración en todo el país deben cerrar temporalmente e inmediatamente para permitir que los funcionarios de salud pública logren el control de la epidemia” dijo Tabaddor, cuyo tribunal está en Los Ángeles.

Fanny Behar Ostrow, es presidenta de la Federación Estadounidense de Empleados Gubernamentales Local 511, que representa a abogados de la Oficina del Control de Inmigración y Aduanas, contadores, ingenieros, arquitectos y otros profesionales dentro de la agencia federal.

“Es un riesgo realmente enorme exigir que los abogados, el público y los jueces comparezcan en estos tribunales llenos de gente”, dijo Behar Ostrow. “Creemos que la vida es mucho más importante que llevar a cabo una audiencia de inmigración. Creo que la seguridad y la vida de las personas superan todas las otras consideraciones”.

Es imposible que el personal de la corte y los litigantes tomen las medidas apropiadas para protegerse del coronavirus –como el distanciamiento social– mientras están dentro de las salas de inmigración, dijo Laura Lynch, asesora de política de la Asociación Americana de Abogados de Inmigración, una asociación de abogados y profesores de inmigración que proporcionan educación legal y servicios profesionales a familias y empresas estadounidenses.

“Hemos estado en contacto con los principales expertos en salud pública quienes nos explicaron que realmente nos enfrentamos a una pandemia histórica y global y si no tomamos medidas inmediatas, no solo ponemos en peligro a los jueces, los abogados, al personal de la corte, sino a todas las personas con las que entran en contacto”, dijo Lynch. “Esta es una amenaza real a la que todos nos enfrentamos. La ciencia es clara en que debemos cerrar todas las audiencias de la corte de inmigración inmediatamente para evitar la propagación del coronavirus”

A partir del 18 de marzo, la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración ha pospuesto indefinidamente todas las audiencias del calendario principal para los inmigrantes que no están en detención federal.

Sin embargo, muchas de las cortes de inmigración –algunas de las cuales se vieron obligadas a cerrar inicialmente como resultado de la decisión de la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración– permanecen abiertas a pesar de estas precauciones. Las cortes que no pueden escuchar casos no detenidos están escuchando casos detenidos y aceptando presentación de documentos.

“Eso no fue obvio”, dijo Lynch. “Eso es algo que debería haberse hecho al menos una semana antes. Pero simplemente no fue suficientemente lejos. Todavía hay numerosas personas en la sala de audiencias que podrían estar potencialmente propagando el coronavirus y simplemente no tenemos las pruebas para saber quién tiene el virus y quién no”.

Muchas de las cortes a destacar que inicialmente habían cerrado en respuesta a la pandemia, incluyendo algunas en Atlanta, y Los Ángeles volvieron a abrir el 25 de marzo para aceptar presentaciones y/o determinar audiencias de personas detenidas.

El personal de las cortes de inmigración está buscando mucho más que el aplazamiento de las audiencias no las personas que no están detenidas. Dijeron que están buscando un cierre completo a nivel nacional de todos las cortes de inmigración por el momento, y para que el Departamento de Justicia promueva un espacio más seguro y limpio para que los jueces, abogados y migrantes los utilicen después de que se levante el cierre temporal.

“No están mostrando la flexibilidad que se requiere en esta situación de emergencia”, dijo Tabaddor sobre la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración. Es muy importante reconocer la importancia de poner la salud de las personas por encima de todo antes de que podamos empezar a centrarnos en el siguiente paso, que es cómo hacemos que este sistema funcione bajo las limitaciones que debemos honrar”.

En una declaración a Cronkite News, un representante de la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración dijo que ha estado gestionando la situación de acuerdo con su plan de protección de la fuerza laboral pandémica, que ha estado en vigor desde 2014.

Para algunos, el cierre completo es la única manera de proteger a aquellos que trabajan en la salas de las cortes.

Lynch dijo que la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración no ha hecho lo suficiente.

“Para ser claros, están fallando en cumplir sus obligaciones de garantizar un ambiente seguro y saludable dentro de los tribunales de nuestra nación, lo que dañará a la comunidad en general”, dijo.

Lynch añadió que las personas detenidas son principalmente familias migrantes, solicitantes de asilo e individuos que buscan regularizar su estatus.

“Son poblaciones muy vulnerables que podrían ser potencialmente un compromiso por la propagación de este virus”, dijo Lynch. “Fue una decisión muy difícil para nuestra organización presionar al Departamento de Justicia para que suspendieran todas las audiencias porque estamos profundamente preocupados por todas esas personas vulnerables en el programa de Protocolos de Protección de Migrantes, así como por la población detenida”.

Behar Ostrow dijo que los retrasos son lamentables pero inevitables en circunstancias tan extraordinarias.

“Me siento mal porque ellos (los migrantes) tienen que esperar su audiencia en la corte, pero al mismo tiempo, es mejor que tengan una audiencia en la corte y se expongan a este virus y posiblemente se enfermen, y quién sabe qué más”, dijo.

Las organizaciones están recomendando varias soluciones para que la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración las implemente por el momento. Esperan que si el Departamento de Justicia cierre todas las cortes de inmigración de los Estados Unidos durante unas semanas, y así tengan tiempo suficiente para decidir cómo seguir escuchando los casos de una manera más segura a medida que el mundo continúa luchando contra la pandemia.

“Tenemos que pensar en las maneras en que las cortes pueden funcionar sin las interacciones del día a día”, dijo Tabaddor. “Usted puede llevar a cabo una gran cantidad de los negocios de la corte en papel. También necesitan asegurar las computadoras portátiles para que las personas puedan hacer teletrabajo de manera más eficaz. Debe haber maneras de ver cómo llevar a cabo una misión de la corte sin exponer a las personas a un riesgo innecesario para su salud”.

Behar Ostrow, quien también es asesora jefe asistente de la oficina de ICE en Miami, dijo que el teletrabajo ha sido una solución efectiva dentro de esa agencia.

“Es realmente una pena que hayamos tenido que luchar tan duro para que el Departamento de Justicia haga lo correcto” dijo. “Mi agencia dio autoridad a los abogados para que aparecieran telefónicamente. Finalmente están haciendo lo que creo que es lo correcto. Ayer nos dieron permiso para que todos estuviéramos vía telefónica e incluso desde nuestros hogares, sin siquiera ir a la oficina.

“Siempre hay soluciones. Solo tenemos que buscarlas, encontrarlas e implementarlas”, agregó Ostrow.

La Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración implementó su primer cierre completo el 11 de marzo, cuando cerró la Corte de Inmigración de Seattle debido al brote de coronavirus en la región. La corte de inmigración de Seattle estaba destinada a permanecer cerrada hasta el 10 de abril, pero reabrió el 26 de marzo.

“Cuando consultamos con los expertos en salud pública”, dijo Tabaddor, “dijeron que no hay tal cosa como “zonas rojas” porque en este momento no tenemos suficientes pruebas. La falta de pruebas y, por lo tanto, la falta de casos confirmados no significa en modo alguno que ese lugar no sea un factor de riesgo. Todos son un factor de riesgo. Es por eso que todos deben seguir las reglas si nosotros como nación queremos hacer lo que tenemos que hacer para proteger la salud y la seguridad de todos”.

La decisión del Departamento de Justicia de permitir que varias cortes de inmigración permanezcan abiertas prevalece mientras que muchas otras cortes federales y estatales en todo el país suspenden temporalmente los juicios penales y civiles en respuesta a la pandemia, lo que aumenta la frustración que sienten los jueces de inmigración y el personal de las cortes.

“Es muy problemático que se trata de una decisión política y no necesariamente una que se está tomando a partir de la salud y la seguridad de la comunidad” dijo Lynch. “Esta administración está priorizando las deportaciones sobre la salud y la seguridad de la comunidad en general”.

Behar Ostrow comparó esta situación con el cierre más reciente del gobierno federal, donde la administración Trump ordenó a todos los tribunales que cerrarán desde el 22 de diciembre de 2018 hasta el 25 de enero de 2019.

“No sé qué es lo que motiva (al Departamento de Justicia)”, dijo Behar Ostrow, “pero puedo asegurarle que creo que la salud y la seguridad y el bienestar de los empleados y jueces federales y el público y la comunidad en general es mucho más importante que una batalla sobre un presupuesto federal y un muro fronterizo”.

Tabaddor señaló que el país está en “un estado federal de emergencia”.

“Los funcionarios de salud pública que son uniformes en sus recomendaciones de que las personas no deben participar en las interacciones sociales, particularmente en cualquier caso en el que usted está a menos de seis pies de otra persona o en un entorno de grupo de más de diez personas”, dijo.

“Los procedimientos judiciales de inmigración, por definición, implican regularmente eso”.

Este reportaje fue redactado originalmente en inglés por Kelly Donohue/Cronkite News