Autoridades fronterizas afirman que la seguridad no está en riesgo

La frontera entre El Paso, Texas, y Ciudad Juárez, Chihuahua, fotografiada el 8 de mayo, 2016. (Foto por Cronkite News)

Una conferencia integrada por líderes en la política, religión y seguridad en zonas fronterizas tuvo como objetivo aclarar cómo se vive la actualidad de estas comunidades. Su mensaje fue claro: No existe crisis de seguridad. Lo que sí hay, afirmaron, es una crisis humanitaria.

La reunión fue organizada por el Foro Nacional de Inmigración, la conferencia tuvo como partícipes a Jim Darling, alcalde de McAllen, Texas, Eddie Treviño, juez en el Condado Cameron, Texas, y al Pastor Carlos Navarro de la Iglesia Bautista de West Brownsville, Texas.

Esto sucedió en respuesta al cierre de gobierno efectuado por la administración del presidente Donald Trump que tuvo como enfoque abrir negociaciones para asegurar la construcción de un muro fronterizo y días antes del discurso del Estado de la Unión.

“Lo que me gustaría aclarar es esta creencia que la frontera, particularmente aquí en el sur de Texas, no es segura”, dijo Treviño. “Cuando hablamos de seguridad fronteriza, implicamos que la frontera no es segura. Queremos dejar claro que (sí, lo es)”.

Treviño añadió su oposición al muro fronterizo propuesto por la administración de Trump.

“Llevamos décadas diciéndole a la gente que la frontera entre Texas y México ya tiene un muro. Es una barrera natural; se llama el Río Grande”, dijo Treviño. “Si dedicáramos un poco más de tiempo a cuidarlo y usarlo como herramienta, también mejoraría la seguridad fronteriza”.

Treviño declaró que tanto Texas como México se benefician del comercio fronterizo, y que no le gustaría ver esto “impedido como resultado de una crisis fabricada”.

Jim Darling estuvo de acuerdo con la perspectiva de contraparte tejano.

“La impresión que del resto de la nación, y principalmente del resto de Texas, es que hay una crisis en la frontera y que estamos en una ubicación muy peligrosa”, dijo Darling. “De hecho, en las últimas estadísticas del FBI, (el Condado McAllen) fue la tercera zona más segura de Texas y séptima de todos los Estados Unidos”.

Pero esta opinión no es exclusiva de autoridades y religiosos en Texas.

Maureen Meyer es la encargada de supervisar asuntos de Derechos de Migrantes con la Oficina de Washington sobre Latinoamérica, una organización que trabaja para avanzar los derechos humanos a lo largo de Latinoamérica.

Pese a no formar parte de la conferencia, Meyer habló con Cronkite Noticias a poco tiempo de que esta tomara lugar, y coincidió con el punto de vista.

“Lo que hay en la frontera es una crisis humanitaria”, dijo Meyer. “Ha habido un cambio marcado en el tipo de persona que busca cruzar la frontera. Ya no son hombres solteros que vienen buscando trabajo en los Estados Unidos, ahora son familias centroamericanas… huyendo de violencia y persecución en sus países de origen”, concluyó.