Cambiando los estereotipos: mujer transgénero educa con el ejemplo

Italia Miranda acudió a Trans Queer Pueblo, una organización enfocada en la comunidad LGBT, en busca de ayuda para su tratamiento de hormonas sin imaginarse que encontraría más que eso: apoyo, respeto y una oportunidad de realizarse como profesional.

Miranda una mujer transgénero de 35 años, es ahora la coordinadora de Economía Justa de Trans Queer Pueblo, un proyecto que se encarga que las personas no sean abusadas en el área laboral.

“Eso es una cosa que me identifica con (el programa de) economía porque yo sé lo que es buscar ayuda y no tenerla”, manifestó Miranda.

Miranda se refiere a la ayuda que nunca recibió hace 4 años cuando fue víctima de discriminación laboral al ser despedida de un restaurante de comida rápida.

“Se me despidió por ser una persona trans, yo tuve un problema por mi transición”, relató Miranda al recordar que su jefe en aquel entonces la despidió por su apariencia.

Pero gracias a Trans Queer Pueblo ella ya superó esa experiencia y ahora se encarga de que otros no pasen por lo que ella pasó.

El programa de Economía Justa se enfoca en las personas de la comunidad LGBT y en personas que salen de los centros de detención de inmigración. Se encarga de asegurar que estas personas encuentren un trabajo y reciban un salario digno, además de que se les respete y no sean explotados laboralmente.

“La labor de economía justa es apoyar a todos los miembros de la comunidad”, dijo Miranda. “Tener ese espacio donde ellos sean 100 por ciento respetados: sus identidades, un ingreso justo, un trabajo digno”.

En otras palabras “no explotarlos, no porque tu no tienes esto o no tienes aquello vas a ganar menos”, agregó.

Miranda vive en su propia experiencia una de las metas de la organización.

“Nuestra misión es crear liderazgo, fuentes de liderazgo. Todos nuestros programas apoyan a que las personas que estén más interesadas puedan tener una oportunidad para poder ser parte del equipo de organizadores”, dijo Dagoberto Bailon asistente de Trans Queer Pueblo.

Sanando cicatrices

Los beneficios de este tipo de estrategia no son sólo en lo profesional, sino también en lo emocional, explicó Fanny Doran, psicóloga de Mariposa Monarca.

“Tener a muchas personas pensando y creyendo y luchando por una causa similar a la tuya te genera paz, te da tranquilidad, te sientes confortable, puedes hablar y desarrollarse tal y como tu eres, porque todos los que te están rodeando están pasando por la misma situación que tu”, opinó.

Miranda cuenta con ese grupo de personas en Trans Queer Pueblo con quienes se identifica y quienes la respetan tal como es.

“Desde que llegué a Trans Queer Pueblo me enamoré de todos sus proyectos… Me siento en familia, cuando yo llego ahí se me recibe y se me trata con todo el respeto del mundo”, expresó Miranda.

Pero Miranda no siempre fue tratada así.

Hace 16 años fue atacada en México, su país natal, acontecimiento donde perdió sus dientes. Después de esa experiencia decidió huir a los Estados Unidos ya que se sentía desprotegida por el gobierno.

“La inseguridad para mí era mucha. Simplemente te atacan por ser quien eres. Y lo peor es que el gobierno, somos invisible para ellos”, expresó. “Cuando yo quise hablar del tema en vez de apoyarme me atacaron como que: ¿Tu qué hiciste? ¿Qué les hiciste? Cuando uno muchas veces no necesita hacer nada para ser ofendida, atacada y demás”.

Ahora Miranda está solicitado asilo político precisamente por esa dolorosa experiencia.

“Yo sometí mi aplicación para asilo político a principios del año”, dijo Miranda refiriéndose al año 2017.

El asilo político se puede solicitar solamente durante el primer año de haber llegado al país, pero existen algunas excepciones.

Miranda pidió mantener privacidad sobre la estrategia legal de su caso porque aún está pendiente.

Ruben Reyes, abogado de migración explicó que este tipo de excepciones en los casos de asilo se dan cuando hay un cambio de circunstancias. Reyes quien no conoce el caso de Miranda, explicó que en algunas instancias la personas pudo haber sido amenazadas nuevamente.

“Sigo esperando mi cita con el asilo (autoridades de migración) para saber que procede, qué es exactamente lo que va a pasar con mi caso pero vamos súper avanzados y súper optimistas”, dijo.

A pesar de las experiencias de discriminación y odio que Miranda ha vivido se mantiene fuerte y decidida a cambiar los estereotipos negativos que existen contra su comunidad.

“Les voy a demostrar que podemos, que tenemos ese poder, que podemos llegar bien lejos porque tenemos la misma capacidad, la misma capacidad de cualquiera. Entonces eso me empuja a motivar y apoyar a la gente”, comentó Miranda.

Las personas con experiencias similares a las de Miranda en busca de apoyo pueden contactar a Trans Queer Pueblo.