Prevención del consumo de drogas empieza por casa

Osvaldo Benitez es un niño de 13 años alegre y con una sonrisa de par en par.

Pero este no era el caso hace unos meses. Su madre Teresa Benitez notó un cambio en Osvaldo que la preocupó, ya que siempre llegaba molesto de la escuela.

“Y yo a veces le preguntaba: ‘¿qué te pasa?’ y me decía ‘nada’”, dijo Benitez.

Benitez no quiso pasar la falta de comunicación por alto y tenía razón en preocuparse. Durante la adolescencia los jóvenes enfrentan un riesgo más elevado de consumir drogas y alcohol; ya sea por la curiosidad o por permanecer mucho tiempo solos porque sus padres trabajan.

Antes de que su hijo corriera ese peligro, Benitez busco ayuda. Fue a la escuela de su hijo y preguntó cuáles eran sus opciones. Benitez decidió unirse al programa “Familia Adelante” de la organización Amistades.

Se trata de un programa que dura doce semanas. Las instructoras separan a los jóvenes de sus padres después de la cena y cada grupo aprende cosas diferentes: los adultos cómo identificar problemas y drogas, y los jóvenes aprenden las consecuencias de usarlas.

“El empezó a confiar y decirme ‘esto me está pasando”, dijo Benitez. “Aprendes (a) no alterarte. Eso es lo que el programa te enseña, cómo controlarse uno. Porque como padres muchas veces lo primero que hacemos es enojarnos”, dijo Benitez.

Estas clases no solo enseñan lecciones de vida, aquí también se comparte mucho en familia, algo que Osvaldo dijo que le hacía mucha falta.

“Mi mamá siempre está trabajando y aquí puedo compartir más con ella”, agregó el joven.

El adolescente nació en Estados Unidos y habla poco español. Sus padres son inmigrantes mexicanos. Su caso es sólo uno de muchos jóvenes hispanos que se enfrentan a lo que expertos se refieren como una “crisis de identidad”.

Esto es porque a los jóvenes se les hace difícil encontrarse a sí mismos entre dos culturas, explicó Anahi Valenzuela de Amistades. Eso lo sabe ella porque lo vivió en carne propia.

“Me causaba mucha confusión porque ni de aquí ni de allá. Ósea, entonces ‘¿de dónde soy?'” se preguntaba Valenzuela de joven.

Precisamente cómo resolver ese dilema, el sentirse “ni de aquí… ni de allá” es lo que jóvenes en “Familia Adelante” aprenden.

Desde que Osvaldo empezó en el programa no sólo su actitud mejoró, sino también sus calificaciones en la escuela.

Los expertos del grupo Amistades sugieren que los padres se mantengan calmados cuando enfrenten a sus hijos y más si han notado cambios en su comportamiento. Ellos dicen que también es muy importante educarlos acerca de las consecuencias de sus acciones.

Uno de los puntos principales que enfatizan los miembros de está organización es que sólo los padres conocen bien a sus hijos y que deben mantenerse atentos a cambios en su forma de ser y si notan cambios, ir a su escuela inmediatamente para buscar recursos que los puedan ayudar.